Callados
Nadie dedica horas a derramar sobre el papel su indiferencia.
No por que no haya indiferencia… abunda, pero no llega al libro… es que el arte
se engendra en la tensión.
En consecuencia la literatura es parcial, sesgada,
tendenciosa. Le da la palabra sólo a los apasionados. El lado oscuro de la luna
está lleno de poetas mirando callados.
Traigo el ejemplo de una persona con quien tuve trato frecuente
en los tiempos anteriores a su muerte. Ya no veía en el sexo opuesto esa magia que produce un manantial
de palabras ordenadas por un perfume dominante. Ya había visto ir y venir el péndulo, los días,
los líderes y la fama. Ya le aburría la idea del milagro tanto como el
nuevo aviso de jabón en polvo. Lo que fueran a hacer del mundo los que todavía podían
caminar, le importaba poco.
Ya pensaba menos en vivir que en morir. Lo que toda película de suspenso toma como
supuesto principal, el deseo de salvar la vida, a ella le resultaba indiferente. Pensé que con esa ventaja sobre el resto de los humanos podía
lograr alguna cosa significativa, hacer algún descubrimiento, dar un salto
trascendental.
Se lo propuse.
- ¿Como qué? - me preguntó.
Heredé la pregunta, porque murió al poco tiempo. No debiera haberle preguntado eso a mi vieja.
Heredé la pregunta, porque murió al poco tiempo. No debiera haberle preguntado eso a mi vieja.
2 Comments:
te estas pasando. o mas bien mezclando muy bien este lado y el otro, la perversión y el zen. el deseo y el del otro, lo yo y lo oigo, lo siento y la ciencia y lo cierto y acertar, la fibra y el grano de arena que todo locura y da salud a la duda.
saludos
Simon: festejo que tu paracaidas callo en el Chasco mustio de mi blog.
Papaf
Post a Comment
<< Home